NBA | El trabajo sucio de Klay Thompson.
No hace ruido, y cuando nos olvidamos de él… aparece y nos sorprende. Ya lo ha hecho dos veces esta temporada, estadísticamente la peor en los últimos años: la primera ante los Bulls, anotando 14 triples en 28 minutos teniendo únicamente 52 segundos el balón en sus manos y la segunda ayer, cuando anotó 43 puntos botando únicamente 4 veces el balón, la primera de ellas cuando llevaba 21, y acumulando un total de 13 segundos la bola en su poder.
Además de ser capaz de reventar un partido, en el otro aro también lo es de defender al mejor jugador exterior rival. Todo esto le convierte en un jugador crucial para unos Warriors que esta temporada lo tienen que renovar por el máximo o una cifra bastante próxima al mismo si no quieren ver como se marcha para ser el jugador franquicia de algún equipo de mitad de tabla o aún peor… si decide reforzar a algún rival directo con espacio salarial suficiente como podrían ser los Ángeles Lakers.
El problema para los Warriors es que también tienen que renovar a Durant este mismo verano y la temporada que viene tendrán el mismo problema con Draymond Green, por lo que deben decidir a quién destinar su espacio salarial y, en caso de que no se lo den a Klay, veremos si no se arrepienten.
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