ACB | Real Madrid se proclama campeón de Copa por cuarta vez consecutiva tras vencer a Valencia 97-95

El Real Madrid se proclama campeón de la Copa por cuarta vez consecutiva tras vencer al Valencia Basket 97-95 y con último tiro de Van Rossom para forzar prórroga o ganar el partido. Los de Laso se convierte en el campeón después de dominar el partido aunque con Valencia en todo momento dando la cara liderados por Dubljevic. Además los blancos rompen la racha de no ganar la Copa en Vitoria, algo que no hacía desde el 1961.

Comenzaba la final con Randolph saliendo en esta ocasión desde inicio junto a Rudy por parte delos de Laso y finalmente Felipe Reyes pudo jugar después de ser padre la noche del sábado con viaje a Madrid esa misma noche y vuelta al hotel por la mañana. El comienzo de partido trepidante con un intercambio inicial de canastas hasta que el balear del Real Madrid, Sergio Llull se asentó como director de orquesta para seguir firmando una magnífica Copa con dos asistencias y 4 puntos y 8 puntos de Randolph con un parcial de 8-0 obligando a los de Pedro Martínez a pedir un tiempo muerto para intentar ajustar a su equipo, que surtió efecto con un triple de Dubljevic que se iba a los 9 puntos en el primer cuarto. El Madrid a pesar de tardar en coger el tono, firmó un 72% en tiros de 2 en los primeros 10 minutos. El Madrid cerraba el primer cuarto con un 22-16.

El comienzo del segundo cuarto, Valencia Basket salió con gran intensidad con 8 puntos seguidos (5 de Sastre y 3 de Sato) bajando la diferencia en el marcador a 3 puntos pero una pérdida de Oriola y una asistencia a Doncic a Carroll hacía que Valencia pidiera un nuevo tiempo muerto. A mitad del segundo cuarto y con Nocioni ya en pista, los blancos se iban hasta los 10 puntos de diferencias (40-30) gracias a un triple de Llull, que significaba el 5 de su equipo hasta ese momento. Justo en la jugada siguiente, Rafa Martínez acortaba diferencias con un triple (en fuera de tiempo) pero Carroll contestó con la réplica. 6 puntos seguidos, culminados con un triple de Van Rossom debido a  la mala defensa de Randolph en el pick and roll y Valencia Basket acercándose a 4 puntos en el marcador. El cuarto acababa con un tiro fallado de Oriola y que con la punta de los dedos, San Emeterio empujaba para irse al descanso sólo dos puntos abajo 47-45 después de haberse visto 10 puntos por debajo. Randolph (14 puntos), Llull (9) y Carroll (8) por parte blanca y Dubljevic (11 puntos), San Emterio (9) y Rafa Martínez (7) los máximos anotadores del partido.

Valencia Basket acercándose a 1 sólo punto en los primeros compases del tercer periodo obligaba al Real Madrid sacar toda su artillería en ataque para poder responder al intercambio de canastas que proponía los taronja y con un triple de Taylor y otra canasta de Rudy volvían a coger un poco de aire en el marcador. Con dos triples del Real Madrid, uno de Carroll y otro de Llull, Valencia se iba al último periodo 3 por debajo en el marcador.

Los últimos 10 minutos comenzaban con otra canasta del baluarte de Valencia, Bojan Dubljevic y aprovechando que los blancos se cargaron de faltas muy pronto parecía un punto esperanzador para los Pedro Martínez pero seguía siendo demoledor desde el triple con dos al comienzo del periodo de Doncic y Carroll. Una de las claves que el Real Madrid no se fuera en el marcador, salvo el +10 en el segundo cuarto, era el 7 a 16 en el rebote ofensivo con Oriola y Sato, con 4 cada uno. A falta de 5 minutos, Valencia con un triple de Van Rossom volvía a ponerse a 1 punto en el marcador a pesar de no estar Dubljevic en pista pero una discutida decisión arbitral que concedía 3 tiros a Doncic volvía a poner el +4 y la pitada de la grada de Buesa.

Tras el tiempo muerto obligatorio por la televisión, Llull volvía con un triple sobre la bocina y un robo de balón a Sikma que anotaba una bandeja en apenas 10 segundos, Real Madrid ponía un +7 en el marcador. Otro triple de Llull a lo que contestó Valencia con canastas de Dubljevic, Sikma y San Emeterio propiciaba un tiempo muerto de Laso para aguantar los últimos 50 segundos y Real Madrid 4 arriba. Con un triple de San Emeterio a falta de unos pocos segundos y con Randolph con un saque precipitado a Llull que Sastre intercepta y con 0.9 centésimas por delante para que Valencia ganara o empatara el partido. Pero finalmente con tan poco tiempo por delante, Van Rossom decidió botar el balón en vez de tirar hizo que se comieran la posesión y se les escapara la copa.


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